Chatear: ¿revolución o evolución?

Publicado el 12/02/2017

Las nuevas tecnologías han cambiado la manera de relacionarnos. Nos han acercado con los que están lejos, y nos han unido todavía más a los que están cerca. Gracias al chat por móvil, tablet u otros dispositivos, la comunicación es ahora más fácil que nunca. Sin embargo, ¿es verdaderamente tan distinta a la comunicación tradicional?

De acuerdo con los expertos, las redes no han cambiado los patrones básicos de las relaciones entre seres humanos, pero sí han ampliado su alcance. En 1996, antes de que chatear formara parte de nuestro día a día, el psicólogo Rheingld afirmó que las relaciones que nacen en las comunidades virtuales necesariamente integran sentimientos humanos. Hablar por Whatsapp, Skype o Twitter no es tan distinto a conversar con alguien cara a cara. Que haya una pantalla entre emisor y receptor no hace menos humana la comunicación, ni menos fuertes los vínculos que se crean. 

Pero los chats no solamente sirven para conectarnos. Gracias a ellos, podemos acceder a famosos, políticos y otras personalidades de interés con mucha más facilidad. Medios digitales como El País o La Vanguardia realizan asiduamente encuentros virtuales mediante Facebook Live para que sea el público el que haga preguntas a los entrevistados. Solamente es necesario disponer de un smartphone, una tablet o un ordenador. 

Así, chatear por el móvil ya no es solamente compartir con tus amigos el último vídeo viral o las fotos de tus vacaciones. Es participar en los procesos de creación y difusión de información. Este es solamente un ejemplo de las muchas maneras en que las tecnologías han conseguido cambiar la forma como entendemos la comunicación. 

Chatear como novedad educativa

La educación no es una excepción: hace escasamente un año, y bajo el hashtag #XATAC5, se puso en marcha el primer chat educativo en Twitter sobre TIC y educación impulsado en España. Se sumaron a ella 1.406 participantes. En declaraciones al periódico La Vanguardia, su organizadora afirmó que el objetivo del chat era ofrecer “un foro de reflexión sobre educación, compartiendo ideas y experiencias a partir del uso de las nuevas tecnologías”. Y es que la inclusión de chat por móvil u otros formatos de éxito entre los jóvenes puede ser una de las claves de la pedagogía del nuevo siglo. 

Ya nadie duda de que el chat, por móvil u ordenador, ha pasado a formar parte de nuestra cultura. Richard Yates, del bloguero neoyorquino Tao Lin, es una de las novelas que mejor retratan cómo una conversación virtual puede cambiarnos la vida. En el caso de los dos protagonistas de la novela, de 16 y 22 años, las redes sociales les abrieron la puerta al amor y les permitieron dejar atrás sus inseguridades.

Pero no todo es de color de rosa: “durante todo este tiempo me has gustado más cuando hablábamos por el chat de Gmail y no cuando nos veíamos por persona”, afirma uno de ellos. De esta manera, Lin ahonda sobre una de las principales cuestiones sobre las redes sociales y el contacto vía webcam: ¿pueden verdaderamente llegar a sustituir la comunicación en directo? Todavía es pronto para saberlo.

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